Lo bueno de hacer un diagrama lunar (a parte de darte un momento cada día para escucharte y sentir como estás) es que te permite ver tu propio patrón en tu ciclo menstrual. Te permite conocerte y entenderte un poquito más.
Y esto es muy poderoso porque una vez te conoces puedes ser coherente con tus ingredientes, energías, emociones, hormonas… (llámalo como quieras) y organizarte de acuerdo con tu ciclo de una forma más óptima. ¿Esto que quiere decir?
Por ejemplo, si sabes que cuando menstruas (fase reflexiva) no tienes energía mental y necesitas descansar, puedes organizarte para que estos días no hagas más de la cuenta y te des el espacio/tiempo que necesitas, y dejes la faena más grande (dentro de tus opciones) para los siguientes 2-3 días cuando empiezas la fase preovulatoria (fase dinámica) donde tendrás energía para dar y vender.
O si tienes que hablar en público, intenta no hacerlo en las fases premenstrual y menstrual (creativa y reflexiva) sino en la preovulatoria y ovulatoria (dinámica y expresiva) donde estás más abierta al mundo exterior.
Así pues, el diagrama lunar o lunario no es más que una herramienta que puedes usar a tu favor para ser productiva de forma cíclica (y no de forma lineal como se nos dice que tenemos que ser) y aprovechar tu modo de estar en el mundo.
En mi IGTV me podéis ver explicando qué es y cómo funciona el diagrama lunar (lunario) de @eneri.arte. Así podéis tener la información más al alcance de vuestras manos y adentraros a conocer vuestra propia ciclicidad.
Os mando un abrazo desde aquí!