Me emociona cerrar los ojos y dejarme llevar por las sensaciones que tiene mi cuerpo cuando los granos de arena acarician mi mano antes de caer y perderse entre otros. Es un contacto lento,cálido y sutil. Y si abro los dedos lentamente y agudizo toda mi atención en esa parte de mi cuerpo, parece que el tiempo vaya más lento y me de la oportunidad de percibir muchas más sensaciones y dejarlas a flor de piel. Es de aquellas experiencias que te hacen vibrar y te permiten conectar con el presente.